LA RESPUESTA SOCIAL AL VIH/SIDA: ENTRE LAS SUBJETIVIDADES Y LOS PRESUPUESTOS [1]
E. Antonio de Moya, [2] MA, MPH
Consejo Presidencial del SIDA (COPRESIDA) [3]
República Dominicana
Resumen
Se comparan los riesgos asociados a las culturas “castrense” y “universitaria” en jóvenes dominicanos. La cultura castrense se caracteriza por inseguridad, conducta temeraria y autoritarismo. La cultura universitaria se caracteriza por autoritarismo, “donjuanismo” y conducta temeraria. Se describe un proyecto con jóvenes afiliados a pandillas juveniles. Sus líderes fueron adiestrados como facilitadores preventivos del VIH/SIDA. Una campaña basada en graffiti fue respetada por la propaganda electoral. Dieciocho naciones desplegaron su apoyo a la Respuesta Nacional SIDA y formaron una Red de Jóvenes Unidos. La auto-organización de estos jóvenes constituye un nuevo modelo de creación de espacios de esperanza.
Palabras clave: riesgo y prevención VIH, culturas castrense y universitaria, autoritarismo, temeridad, donjuanismo, naciones, graffiti.
La resignificación del riesgo
Mi primer acercamiento analítico a la noción de riesgo fue la lectura del diálogo de los dioses griegos con Aquiles, ofreciéndole optar por una vida corta y divertida u otra larga y aburrida. El riesgo se asimilaba entonces a la virilidad y al heroísmo. Años después surgía la incertidumbre sobre la tendencia al riesgo (risky-shift), i.e., el grupo pequeño tenía mejores logros que el individuo, porque se arriesgaba un poco más que éste. El riesgo devenía el motor del liderazgo y del cambio social. Luego el VIH/SIDA hizo su intempestiva irrupción; el riesgo cambió de valencia y devino maligno.
Este trabajo intenta mostrar cómo algunos “perfiles de creencias” (Pantoja 2007) construyen vulnerabilidad. Con tal propósito compararé los resultados de un estudio sobre la cultura “castrense” (Suero et al. 2004) y otro sobre la cultura “universitaria” (Brea et al. 2004). Luego presentaré los resultados de una intervención en “espacios de esperanza” desarrollados con jóvenes organizados en “naciones” [4] en Guachupita, un barrio marginal de Santo Domingo.
Perfiles de creencias
Whitehead & Carpenter (1999) reportan que entre el personal de las fuerzas armadas canadienses la conducta sexual de riesgo no es vista como irracional o desviada, sino como algo que tiene sentido para el individuo y se conforma con ciertos ideales culturales. Estas prácticas están arraigadas en significados locales construidos socialmente dentro de la milicia. Los significados tienen implicaciones para el riesgo de infección VIH en ciertos contextos.
En hombres, las actitudes de esta cultura se traducen en una disposición de aceptar riesgos innecesarios. El valor de la agresividad, más marcada en ellos y propio de culturas machistas, puede también reflejarse en las conquistas sexuales y en la subyugación de mujeres.
El estudio de policías dominicanos (promedio 31 años) apoya parcialmente la propuesta de Whitehead & Carpenter de que existe la disposición de aceptar riesgos y la agresividad. No obstante, en estos policías no se observó una fuerte tendencia a correr riesgos innecesarios (coito desprotegido con parejas comerciales, 20%). Los traslados tampoco estuvieron asociados con un aumento en el riesgo, siendo la infidelidad masculina culturalmente endémica. Además, se halló una relación entre niveles bajos de autoestima, con niveles altos de consumo de alcohol y niveles bajos de uso del condón.
Los datos fueron reducidos a través de un análisis factorial, de donde se extrajeron seis componentes principales: 1) autoritarismo/autoestima baja; 2) “donjuanismo” (asociación poder-uniforme con sexualidad); 3) asociación sexualidad-consumo de alcohol; 4) conducta temeraria; 5) sentimientos de inseguridad; y 6) actitudes machistas. Probablemente, esta cultura está asociada a la violencia doméstica y los homicidios/suicidios en parejas, donde este “Don Juan de las Calzas Verdes” (Cuervo Márquez 1789), “comienza como ‘rendido amante’ y termina como ‘despiadado verdugo’”.
Estos resultados fueron comparados con indicadores de una cultura “extrema” universitaria (promedio 22 años). La creencia de que las bebidas alcohólicas hacen que se disfrute más en el sexo forma parte importante de la cultura castrense masculina: dos terceras partes de los policías afirmaban esto, contra un tercio de los demás. La noción de que “los tragos” les hacen tener suerte en el amor era sostenida por la mitad de los hombres policía, y por alrededor de 10 por ciento de los otros.
Los universitarios atribuyen el olvidar usar condones en el coito a los efectos del alcohol más que los policías. Los varones universitarios más que las mujeres universitarias, y estas más que los policías, admiten que sus amigos/as se han preocupado por su forma de beber. Con excepción de las mujeres policías (aunque la muestra es muy pequeña), los demás grupos parecen rechazar la percepción de sus amigos/as de que ellos/as tienen problemas de bebida.
Espacios de esperanza
E. Antonio de Moya, [2] MA, MPH
Consejo Presidencial del SIDA (COPRESIDA) [3]
República Dominicana
Resumen
Se comparan los riesgos asociados a las culturas “castrense” y “universitaria” en jóvenes dominicanos. La cultura castrense se caracteriza por inseguridad, conducta temeraria y autoritarismo. La cultura universitaria se caracteriza por autoritarismo, “donjuanismo” y conducta temeraria. Se describe un proyecto con jóvenes afiliados a pandillas juveniles. Sus líderes fueron adiestrados como facilitadores preventivos del VIH/SIDA. Una campaña basada en graffiti fue respetada por la propaganda electoral. Dieciocho naciones desplegaron su apoyo a la Respuesta Nacional SIDA y formaron una Red de Jóvenes Unidos. La auto-organización de estos jóvenes constituye un nuevo modelo de creación de espacios de esperanza.
Palabras clave: riesgo y prevención VIH, culturas castrense y universitaria, autoritarismo, temeridad, donjuanismo, naciones, graffiti.
La resignificación del riesgo
Mi primer acercamiento analítico a la noción de riesgo fue la lectura del diálogo de los dioses griegos con Aquiles, ofreciéndole optar por una vida corta y divertida u otra larga y aburrida. El riesgo se asimilaba entonces a la virilidad y al heroísmo. Años después surgía la incertidumbre sobre la tendencia al riesgo (risky-shift), i.e., el grupo pequeño tenía mejores logros que el individuo, porque se arriesgaba un poco más que éste. El riesgo devenía el motor del liderazgo y del cambio social. Luego el VIH/SIDA hizo su intempestiva irrupción; el riesgo cambió de valencia y devino maligno.
Este trabajo intenta mostrar cómo algunos “perfiles de creencias” (Pantoja 2007) construyen vulnerabilidad. Con tal propósito compararé los resultados de un estudio sobre la cultura “castrense” (Suero et al. 2004) y otro sobre la cultura “universitaria” (Brea et al. 2004). Luego presentaré los resultados de una intervención en “espacios de esperanza” desarrollados con jóvenes organizados en “naciones” [4] en Guachupita, un barrio marginal de Santo Domingo.
Perfiles de creencias
Whitehead & Carpenter (1999) reportan que entre el personal de las fuerzas armadas canadienses la conducta sexual de riesgo no es vista como irracional o desviada, sino como algo que tiene sentido para el individuo y se conforma con ciertos ideales culturales. Estas prácticas están arraigadas en significados locales construidos socialmente dentro de la milicia. Los significados tienen implicaciones para el riesgo de infección VIH en ciertos contextos.
En hombres, las actitudes de esta cultura se traducen en una disposición de aceptar riesgos innecesarios. El valor de la agresividad, más marcada en ellos y propio de culturas machistas, puede también reflejarse en las conquistas sexuales y en la subyugación de mujeres.
El estudio de policías dominicanos (promedio 31 años) apoya parcialmente la propuesta de Whitehead & Carpenter de que existe la disposición de aceptar riesgos y la agresividad. No obstante, en estos policías no se observó una fuerte tendencia a correr riesgos innecesarios (coito desprotegido con parejas comerciales, 20%). Los traslados tampoco estuvieron asociados con un aumento en el riesgo, siendo la infidelidad masculina culturalmente endémica. Además, se halló una relación entre niveles bajos de autoestima, con niveles altos de consumo de alcohol y niveles bajos de uso del condón.
Los datos fueron reducidos a través de un análisis factorial, de donde se extrajeron seis componentes principales: 1) autoritarismo/autoestima baja; 2) “donjuanismo” (asociación poder-uniforme con sexualidad); 3) asociación sexualidad-consumo de alcohol; 4) conducta temeraria; 5) sentimientos de inseguridad; y 6) actitudes machistas. Probablemente, esta cultura está asociada a la violencia doméstica y los homicidios/suicidios en parejas, donde este “Don Juan de las Calzas Verdes” (Cuervo Márquez 1789), “comienza como ‘rendido amante’ y termina como ‘despiadado verdugo’”.
Estos resultados fueron comparados con indicadores de una cultura “extrema” universitaria (promedio 22 años). La creencia de que las bebidas alcohólicas hacen que se disfrute más en el sexo forma parte importante de la cultura castrense masculina: dos terceras partes de los policías afirmaban esto, contra un tercio de los demás. La noción de que “los tragos” les hacen tener suerte en el amor era sostenida por la mitad de los hombres policía, y por alrededor de 10 por ciento de los otros.
Los universitarios atribuyen el olvidar usar condones en el coito a los efectos del alcohol más que los policías. Los varones universitarios más que las mujeres universitarias, y estas más que los policías, admiten que sus amigos/as se han preocupado por su forma de beber. Con excepción de las mujeres policías (aunque la muestra es muy pequeña), los demás grupos parecen rechazar la percepción de sus amigos/as de que ellos/as tienen problemas de bebida.
Espacios de esperanza
Desde principios de 2005 COPRESIDA lanzó el proyecto “Muchachos Nuevos en las Calles”. Este consiste de intervenciones con jóvenes de clase popular afiliados/as a “naciones” que buscan con su agencia trascender sus limitaciones culturales y políticas. Sus líderes participaron en adiestramientos como entrevistadores/as para un estudio etnográfico sobre resistencia juvenil al fatalismo y la hipocresía (ver Brotherton, en impresión) e hicieron consultas con sus “Capítulos” en el exterior para buscar la autorización de trabajar junto a otros grupos. Luego lanzaron una campaña culturalmente apropiada de prevención del VIH/SIDA basada en graffiti.
La orientación territorial inicial hacia la muerte fue transformada en una orientación hacia la vida. Un intento de homicidio de una adolescente por su novio “jugando” en un taller causó gran conmoción y repudio y solidificó la cohesión. Este evento marcó, quizás, la “liberación cognitiva” de los grupos. El uso del condón se convirtió en el medio favorito de prevención de los jóvenes. Cada nación “vistió” con sus colores al “Supercondón,” un personaje tipo comix adoptado por todos/as como símbolo de protección.
Los partidos políticos desplegaron su propaganda electoral alrededor de los graffiti (mediados 2004), sin transgredir el espacio de las naciones. Los grupos cambiaron la consigna inicial “Por mi barrio vivo” a “En mi barrio hay vida.” La lucha contra el estigma por VIH y contra la violencia se convirtió en su grito de guerra.
Dieciocho naciones aliadas desplegaron visiblemente su apoyo a la Respuesta Nacional al VIH/SIDA, mientras un colorido graffiti anunciaba la constitución de la Red de Jóvenes Unidos de Guachupita (RJUG). Cientos de jóvenes se unieron a una marcha contra la violencia de género convocada por ellos/as (noviembre 2005). Una multitud se reunió en un encuentro organizado por la RJUG con motivo del Día de San Valentín (2006). Al visitar la comunidad, niños/as nos hacen con sus dedos las señales que identifican a los grupos, anunciándonos el futuro.
Conclusión
La cultura castrense, predominantemente masculina, pero compartida por las mujeres policía, se caracteriza por inseguridad, conducta temeraria y autoritarismo. La cultura universitaria masculina se caracteriza por autoritarismo, “donjuanismo” y conducta temeraria. Las mujeres universitarias y los hombres policía exhiben conductas temerarias similares. Autoritarismo y temeridad parecen ser rasgos comunes a estos grupos de jóvenes dominicanos. La auto-organización de jóvenes de clase popular integrados a naciones que han unido sus energías a favor de la prevención del VIH/SIDA y la violencia, así como del desarrollo de su comunidad, constituye un nuevo modelo de creación de espacios de esperanza.
Referencias
Brea de Cabral M, Méndez-Pumarol L, de Moya EA, Jiménez RO. (2004). “Conocimientos, Creencias, Actitudes y Prácticas Sexuales Relevantes al VIH/SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en Personal de la Policía Nacional.” COPRESIDA: Santo Domingo.
La cultura castrense, predominantemente masculina, pero compartida por las mujeres policía, se caracteriza por inseguridad, conducta temeraria y autoritarismo. La cultura universitaria masculina se caracteriza por autoritarismo, “donjuanismo” y conducta temeraria. Las mujeres universitarias y los hombres policía exhiben conductas temerarias similares. Autoritarismo y temeridad parecen ser rasgos comunes a estos grupos de jóvenes dominicanos. La auto-organización de jóvenes de clase popular integrados a naciones que han unido sus energías a favor de la prevención del VIH/SIDA y la violencia, así como del desarrollo de su comunidad, constituye un nuevo modelo de creación de espacios de esperanza.
Referencias
Brea de Cabral M, Méndez-Pumarol L, de Moya EA, Jiménez RO. (2004). “Conocimientos, Creencias, Actitudes y Prácticas Sexuales Relevantes al VIH/SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en Personal de la Policía Nacional.” COPRESIDA: Santo Domingo.
Brotherton D. Beyond social reproduction: Bringing resistance back in gang theory. Journal of Theoretical Criminology. (forthcoming)
Cuervo Márquez C. (1789). La Leyenda de El Verde. Santa Fe de Bogotá, Colombia.
De Moya EA, Castro L, Peña V. (2007). New Kids on the Streets. Trabajo presentado en la conferencia “Transnacionalización y Globalización de las Organizaciones de la Calle”. John Jay College of Criminal Justice, City University of New York (CUNY). Febrero 10-16.
Feixa C. (2006). Jóvenes ‘latinos’ en Barcelona. Espacio público y cultura urbana. Barcelona: Anthropos Editorial.
Pantoja J. (2007). Vulnerabilidad, Identidad juvenil y Postmodernidad. Primera Conferencia Virtual Latina “Juventud, Salud y Cultura del Riesgo. Alianzas y Redes”. www.Grupigia.Com/Clatvirtual1
Suero W, Céspedes R, de Moya EA, Jiménez RO. (2004). “Conocimientos, Creencias, Actitudes y Prácticas Relevantes al VIH/SIDA y las ITS en Estudiantes Universitarios/as Dominicanos/as.” COPRESIDA: Santo Domingo.
Whitehead PC, Carpenter D. (1999). Explaining unsafe sexual behaviour: cultural definitions and health in the military. Cult Health Sex, Oct-Dec;1(4):303-15
Apéndice (Pedimos excusas a nuestros/as lectores/as pero el blog no admite el formato de tablas)
Tabla 1. Indicadores del posible vínculo entre los sentimientos de inseguridad, la temeridad, la baja autoestima, el autoritarismo y el donjuanismo en policías y estudiantes universitarios de uno y otro sexo. (Brea el al. 2004)
Indicador: Policía [Masculino (n=585)] [Femenino (n=34)]; Universidad [Masculino (n=501)] [Femenino (n=969)]
Hay que estar bronco para no caer en gancho: Pol [M=96.2%] [F=94.0%]; Uni [M=67.4%] [F=67.5%]
Me pongo chivo/a cuando alguien que conozco me hace un favor: Pol [M=93.2%] [F=82.0%]; Uni [M=48.9%} [F=49.2%]
Si me descuido, tratarían de robarme: Pol [M=92.8%] [F=88.0%]; Uni [M=57.8%] [F=57.0%]
Yo puedo decir que son pocas las cosas a las que les tengo miedo: Pol [M=76.8%] [F=65.0%]; Uni [M=49.9%] [F=40.2%]
A la gente no le importa lo que a uno le pase: Pol [M=71.6%] [F=50.0%]; Uni [M=40.1%] [F=40.0%]
Conocer gente importante me hace sentir importante: Pol [M=59.7%] [F=56.0%]; Uni [M=65.8%] [F=59.3%]
La gente exagera la importancia que tiene la vida: Pol [M=45.0%] [F=50.0%]; Uni [M=28.5%] [F=16.7%]
Una de las cosas que más me llenan es conquistar a una nueva persona: Pol [M=33.0%] [F=38.0%]; Uni [M=46.7%] [F=16.3%]
Me gusta la velocidad cuando ando en carro o motor: Pol [M=23.2%] [F=9.0%]; Uni [M=43.9%] [F=25.4%]
Tabla 2. Indicadores del posible vínculo entre el erotismo y el consumo de alcohol en policías y estudiantes universitarios de uno y otro sexo. (Brea et al. 2004)
Indicador: Policía [Masculino (n=585)] [Femenino (n=34)]; Universidad [Masculino (n=501)] [Femenino (n=969)]
Cree que los tragos hacen que se goce más en el sexo: Pol [M=64.1%] [F=32.0%]; Uni [M=38.8%] [F=32.4%]
Cree que los tragos les hacen tener suerte en el amor: Pol [M=51.6%] [F=12.0%]; Uni [M=13.5%] [F=5.1%]
Dice que sus amigos/as se han preocupado por su forma de beber: Pol [M=5.6%] [F=6.0%]; Uni [M=19.4%] [F=9.6%]
Dice que los tragos hacen que se le olvide usar condones en el sexo: Pol [M=14.42%] [F=15.0%]; Uni [M=26.0%] [F=26.0%]
Dice que tiene problemas de bebida: Pol [M=1.7%] [F=6.0%]; Uni [M=4.8%] [F=3.4%]
Notas
[1] Primera Conferencia Virtual Latina “Juventud, Salud y Cultura del Riesgo. Alianzas y Redes” www.Grupigia.Com/Clatvirtual1. Mesa ‘D’. Sobre Instituciones y Políticas Públicas, 26 de marzo, 2007.
[2] Psicólogo social y epidemiólogo dominicano con estudios universitarios en Puerto Rico, Nueva York y Jerusalén. Actualmente es Consultor Nacional de Investigación & Desarrollo de COPRESIDA.
[3] COPRESIDA es un consorcio de organizaciones de los sectores público, privado comercial, comunitario, espiritual, y las redes de personas que viven con VIH/SIDA (PVVS), adscrito al Poder Ejecutivo.
[4] En República Dominicana y en otros contextos, el concepto de “naciones” designa a lo que se conoce como “pandillas juveniles,” una forma de auto-organización de los jóvenes de clase popular. En palabras de Carles Feixa (2006), el concepto alude “a lo que un país pudo haber sido y no fue.” (Ver http://epistheme-tonydemoya.blogspot.com/2007/03/noticias-del-frente-migratorio-006.html).
No hay comentarios:
Publicar un comentario