miércoles, mayo 21, 2008

Noticias del Frente Sensorial 018

Viaje a la homofobia (Esta historia si ha cambiado...)
.


Catalogados como parte de lo que entonces se llamó “lacra social”, primero a muchos homosexuales se les envió a las llamadas Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP).

Por: Alfredo Prieto

18 de Mayo del 2008 – 7dias.com.do, Cuba

Ayer sábado 17 de mayo se celebró la Jornada Cubana por el Día Mundial contra la Homofobia. Convocado por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), con el apoyo de “varias instituciones del Estado, el gobierno y la sociedad civil”, y bajo el eslogan “La diversidad es la norma”, se efectuaron diferentes actividades educativo-culturales dirigidas a sensibilizar a la población acerca de este problema. Entre otras cosas, hubo paneles sobre transexualidad, lesbianismo y travestismo, así como sobre sexualidad y homofobia en el teatro cubano. Como colofón, se anunció un espectáculo de transformistas en el céntrico cine-teatro Astral al que no pude asistir, porque esta vez sus organizadores lo concibieron por invitación.

El fantasma de Funes el Memorioso me lleva hoy de la mano a evocar mínimamente cómo llegamos a este punto. El recorrido ha sido largo: una revolución radical, que alteró de mil maneras los modos, hábitos y costumbres, comenzando por una portentosa campaña de alfabetización, fue sin embargo bastante conservadora en materia de alteridad y sexualidad. Presa de sus circunstancias y de una cultura heredada (porque desde aquí y ahora no se le pueden pedir peras al olmo) el gran suceso de 1959 no pudo deshacerse de la tradición, esa que según los clásicos del marxismo merodea “como un duende sobre las cabezas de los hombres”, y por consiguiente reprodujo patrones homofóbicos que retroalimentaron el machismo recibido de España y de las culturas africanas, una mezcla explosiva a la hora de lidiar con la otredad.

Catalogados como parte de lo que entonces se llamó “lacra social”, primero a muchos homosexuales se les envió a las llamadas Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP) --una medida tristemente célebre, aunque efímera-- por donde pasaron no sólo ellos, sino también figuras tan conspicuas como el trovador Pablo Milanés, el cardenal Jaime Ortega y el reverendo Raúl Suárez, entre otros que por distintas razones fueron incluidos en el peculiar concepto. Luego, en los turbulentos y dogmáticos años 70, un Congreso de Educación y Cultura definió al homosexualismo como una “patología social” y excluyó --por lo menos en el espíritu-- a las personas de esa orientación sexual de las escuelas y la dirección de la cultura.

Hasta en esto se fue convencional, pues definirlo así implicaba situar la preferencia en los terrenos de la psicología y la medicina, un claro desfas en un contexto donde el mundo ya había comenzado a hacerse preguntas al respecto que nos llegaron, como tantas cosas, tardíamente. Fue, sin dudas, el peor momento de esa historia. A escritores de esa orientación sexual no se les permitió publicar en la Isla, como tampoco a los religiosos --y, a veces, los dos cosas eran una sola--, hecho este último fundamentado en el “ateísmo científico”, una categoría foránea que perdía de vista que la religión forma parte de la cultura y no se suprime por simple voluntad política, ni estigmatizando, ni botando (el expediente de excluidos de ciertas carreras o expulsados de la Universidad no me dejará mentir).

Y el Mariel, con su enorme carga de polarización e irracionalidad, realimentó los patrones duros y estimuló a muchas personas a acoger como propio un estigma que en verdad no tenían --el de homosexual o “maricón”-- para poder salir del país como “escoria”, un código designado para aquella estampida, integrada fundamentalmente por hombres jóvenes, oscuros, solteros y desempleados que a menudo tenían problemas con la Ley, pero en el fondo algo más compleja que eso.
.

Mariela Castro Espin, directora de CENESEX

Como el monte se tumba cortando primero los árboles, hay consenso en reconocer el importante papel que desempeñó un filme de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío (Fresa y Chocolate, 1993), al llamar la atención sobre la complejidad del fenómeno más allá de las etiquetas, y al defender la idea de una dinámica auténticamente humana entre dos personas de orientación sexual distinta y formación contrapuesta.

Desde luego, eso no significa que el machismo se haya evaporado automáticamente de la cultura, pero hoy se percibe al menos, sobre todo en las generaciones más jóvenes, un mayor grado de aceptación de la alteridad: tomo nota de que mi hijo menor usa más la palabra “gay” en lugar de la otra. Un dato de no poca monta es que una comisión de la Asamblea Nacional tiene actualmente en estudio un proyecto de Ley sobre el cambio de identidad sexual y lo transgenérico, lo cual, de aprobarse, pondría a Cuba en un lugar de punta en el concierto de las Américas.

Esto, más la moratoria de la pena de muerte, y no tanto la autorización para comprar objetos, marca, Flavio, la verdadera senda de los cambios.

[El autor es ensayista y editor cubano. Reside en La Habana.]

******
Luis Barrios. COQUIANDO: Meditaciones subversivas para un mundo mejor
.


Prólogo

Por: P. Rogelio Cruz

¿Has leído la arrebatadora parábola "Juan Salvador Gaviota", la parábola de la gaviota rebelde. ¿Verdad? Richard Bach se la dedica al verdadero Juan Gaviota que todos y todas llevamos dentro. iQué verdad! Luis Barrios es un hombre libre y rebelde hasta más no poder; él no busca imponer su creencia, su fe o su verdad a nadie, sino que lo que busca es que la justicia se haga realidad; es de los que siguen confiando en la posibilidad de construir una sociedad nueva. Una sociedad donde nadie este amenazado por el hambre, la marginación, la guerra, la explotación o la discriminación.

A ser libre y a ser rebelde se aprende cada día y Luis Barrios lo ha aprendido muy bien.

Coquiando es un grito interior de una doble exigencia. Por un lado, la exigencia de un nuevo mundo, una nueva sociedad, con todo lo que eso significa (nuevos lazos, nueva forma de ser, nuevos horizontes), el Cielo Nuevo y la Tierra Nueva anunciadas en el Libro del Apocalipsis y por otro, la rebeldía frente al statu quo, donde se quiere justificar lo injustificable, donde se sigue rociando con agua bendita los sepulcros blanqueados de una sociedad que es como el Caballo de Troya, que lleva dentro su propia destrucción. Y que lo que necesita es liberación.

Coquiando es un grito de rebeldía. Es un grito de libertad. Es un anuncio de que el tiempo de las certezas ha pasado irremediablemente y que el hombre y la mujer de hoy deben aprender a vivir hoy y ahora y darle respuestas alas exigencias del hoy y de los momentos actuales. Luis Barrios ha entendido que vivimos en una sociedad en rápido cambio, es decir, una sociedad cambiante, don de hay una gran desconfianza hacia un pasado gobernado por certezas, y que esta preocupada por la estabilidad y la continuidad.

Hoy nos damos cuenta y Coquiando es un perfecto ejemplo de que las cosas pueden ser diversas. Hoy se busca la seguridad en el caminar, no en el camino ya hecho. La propuesta es que se debe estar siempre dispuesto a cambiar, no se puede parar. De ahí que debemos atrevemos, y atrevimiento o santo atrevimiento es lo que Ie sobra a Luis Barrios; el mundo de hoy requiere de atrevimiento y un nuevo inicio con ilusión y gozo. De la gente cobarde no se ha escrito nada. jHay que atreverse! jHay que correr riesgos! Hay que auto-motivarse para probar nuevas maneras de hacer lo viejo, poner en práctica nuevas formulas, tratar alternativas diferentes: producir ideas creativas.

Hay que atreverse y, de vez en cuando, salirse del cuadro y ser tan atrevidos como para llegar a hacer algo total mente diferente a como se acostumbra hacer. Lo que sucede es que tenemos miedo al riesgo y por eso no cambiamos, pero el peor de los riesgos es el no arriesgamos. Hay que vencer cualquier signo de miedo al cambio. Y esta es la grandeza que muestra Luis Barrios a lo largo de todo el contenido de su libro Coquiando.

Hoy, más que nunca y en este libro de Luis Barrios se hacen realidad las palabras de Dietrich Bonhoeffer, teólogo protestante condenado a muerte por haber tornado parte en un complot para acabar con Hitler, escritas desde la prisión, en 1944; estas proféticas palabras:

"Habrá de llegar un día en que los hombres [y mujeres] volverán a ser llamados/as a proferir la Palabra de Dios de tal manera que el mundo, bajo su influencia, se transforme y se renueve. Será un lenguaje nuevo, quizás completamente arreligioso, pero será un lenguaje liberador y redentor como el de Jesús. Los hombres [y las mujeres] habrán de espantarse ante dicho lenguaje, pero así serán dominados por su poder. Será el lenguaje de una nueva justicia y verdad, un lenguaje que anunciará la paz de Dios con los hombres [y las mujeres] y la proximidad de su Reino. "Se espantarán y se estremecerán ante tanta bondad y tanta paz como voy a concederles (ler: 33,9)". (Boff, Leonardo).

Estas palabras parecen tener pleno cumplimiento en la forma del cristianismo vivida, anunciada, predicada y propuesta por Luis Barrios, donde la Palabra de Dios se releva como factor de transformación y liberación de la gente oprimida y marginada:

- Un ejercicio del poder sagrado ya no predominantemente burocrático, centrado en el eje clerical, sino que se trata de un poder colegiado, que permita la participación de todos/as en las decisiones y tareas.

- La elaboración de un proyecto igualitario y participativo, para todo el conjunto de la sociedad.

- Una santidad política, donde se ame a pesar de los conflictos de clase, donde nos solidaricemos con los estratos oprimidos, donde obedezcamos ascéticamente las decisiones tomadas comunitariamente, donde se esté dispuesto a dar la propia vida por fidelidad al Evangelio y a los/as hermanos/as oprimidos/as.

- Donde el poder (cualquiera que sea) que detenta la persona se legitima constantemente mediante la práctica.

- El nacimiento de una nueva sociedad a partir del pueblo oprimido.

- Donde las gentes pobres, organizadas y concienciadas llamen a las puertas de sus patrones y exijan vida, pan, libertad y dignidad.

- Donde a la gente cristiana no se Ie tache jamás de opio del pueblo, ni tampoco de favorecer solamente el espíritu crítico, y sea ahora un factor de transformación en favor del compromiso de liberación.

- Donde el Evangelio se dirija no solamente al hombre y a la mujer moderna y crítico, sino principalmente a los/as "no hombres/no mujeres", es decir a quienes se les niega su dignidad y los derechos fundamentales.

- Donde el compromiso con la liberación de millones de gentes oprimidas de nuestro mundo Ie devuelva al Evangelio una credibilidad que sólo tuvo en sus orígenes.

Sin desesperamos y sin detenemos en nuestro trabajo, nos preguntamos una y mil veces, cuándo llegara el "nuevo mundo", la "nueva sociedad", la "otra realidad", el cual y la cual han anunciado con bombos y platillos todos/as aquellos/as que han anunciado la caída del antiguo orden y el surgimiento de una nueva realidad. iNo será que nos ha pasado como a los modernistas, que a fuerza de tanto criticar los antiguos, terminamos siendo tan antiguos como aquellos/as a quienes criticaban? 0, más bien, ¿no será que queremos cosechar sin haber sembrado?

Una nueva sociedad cuya bandera principal será la liberación. Sí, liberación poderosa e irresistible aspiración de los pueblos y uno de los signos de los tiempos. El hombre moderno (y la mujer moderna) anda en busca de liberación, de una vida liberada que para las gentes pobres pasa por los sacramentos humildes de pan, de una casa, de salud y de paz. Sí, liberación, palabra evocadora llena de resonancias. En ella se funde lo espiritual, lo material, lo histórico y lo meta histórico. Palabra abierta hacia lo alto.

Hacia la trascendencia divina, y palabra abierta hacia abajo: hacia la inmanencia de la tierra. Palabra que despierta el fermento de esa nueva historia que estamos llamados a construir y con la que Luis Barrios ya comenzó su construcción.

Una nueva sociedad ya en este mundo, una sociedad alternativa a la capitalista, pero realmente alternativa. Una sociedad más plena y más humana, sociedad libre y liberadora.

Es maravillosa la oportunidad que tiene el ser humano, de encontrar verdaderos modelos y auténticos valores que lo convenzan y le den seguridad en vida. Se siente un hastío y a veces hasta un asco de lo que se vive y se propone a diario en esta sociedad. Es propicia la ocasión, y Luis Barrios lo hace muy bien, para presentar y poner los conocimientos de esa nueva espiritualidad, donde todos y todas quepamos. Una espiritualidad que nos lleve a ver a lo Cristo, ser a lo Cristo y actuar a lo Cristo y esto es una verdadera espiritualidad.

Aquí es donde Luis Barrios es un maestro de nuestra sociedad, rescatando al ser humano, sin importar cual sea su situación; es que por más vueltas que Ie demos, el ser humano es un ser integral, y como tal debe vivir, ser, pensar y actuar. Rescatemos la espiritualidad de todo ser humano y de esa manera estamos trabajando arduamente por hacer un mundo más humano. El, Luis Barrios, es una humanidad de seres libres.

A mi juicio, seis son los escenarios alrededor de los cuales se mueve Luis Barrios, en su libro Coquiando:

1. Venezuela, con cuestiones como éstas: ¿Por que molesta Hugo Chávez? Venezuela: Una dictadura con respaldo popular. Hugo Chávez no es un santo, pero tampoco es un diablo.

2. Estados Unidos, con cuestiones como las siguientes: Des-ideologizando las animaladas de Bush. ¿Quién es más criminal? ¿Saddam o Bush? Bush sembró tormenta. La Casa Blanca tronó. Yo acuso al régimen de Bush. ¿Tan bueno era Reagan? El espiritualismo acomodaticio de Bush. Bush prosigue pinochiando.

3. República Dominicana, con cuestiones como éstas: Viviendo un nuevo pensamiento dominicano. Callejón sin salida a la dominicana. Feliz cumpleaños, Profesor Bosch. Dominicanadas del diario vivir. Narcisazo: el crimen de la impunidad y de la indiferencia.

4. Puerto Rico, con reflexiones como éstas: Algo no huele bien en la colonia. Coño, despierta, boricua. No veneremos el yugo del colonialismo. Desafíos puertorriqueños. ¿Es posible descolonizar dentro de la colonia? Politiqueando a lo boricua. La borrachera boricua. La saga colonialista puertorriqueña.

5. Haití, con reflexiones como éstas: Crisis haitiana. Desmitificando la crisis haitiana. ¿Por que no nos mueve el terrorismo político contra Haití?

6. Cuba, tratando situaciones como éstas: Fidel es la sal de la tierra. ¿Qué sucede si Fidel ya no es Presidente de Cuba?

******
La Red de Estudios de Familia en el Caribe (Red Fam) y el Proyecto Atlantea – Intercambio Universidad de Puerto Rico (UPR) / Caribe

INVITAN ESTA NOCHE

A LOS/AS LECTORES/AS DE EPISTHEME, A LOS ESTUDIOSOS DE LA JUVENTUD, A LOS JOVENES Y AL PUBLICO EN GENERAL

A la puesta en circulación y firma de autógrafos del libro editado por la Dra Ruth Nina Estrella

Acercamiento Multidisciplinario sobre la Adolescencia en el Caribe


Palabras de bienvenida: Ruth Nina Estrella (editora), Profesora de Psicología, UPR

Análisis crítico del libro: Tahira Vargas, Antropóloga Social, investigadora independiente

Dos de los autores exponen:

Las Naciones de Guachupita (exhibición de diapositivas): Antonio de Moya, COPRESIDA / ISH-UASD

El enlace de abuelos y nietos: Carmen Delia Sánchez, Escuela de Trabajo Social, UPR

Preguntas, respuestas y comentarios

Agape

Librería Thesaurus, Ave. Abraham Lincoln esq. Ave. Sarasota, Santo Domingo

Hoy miércoles 21 de mayo 2008, 7:00 de la tarde

Ejemplares del libro, calentitos, estarán a la venta en la Librería Thesaurus

******
GALDE

Te invita

Al Estreno Mundial del primer cortometraje lesbico dominicano

Sol, Mar y Estrella
.


Directora: Yaromil Fong-Olivares

Sol, Mar y Estrella es la historia de una joven dominicana que se enamora de la amiga de su madre, quien es lesbiana. La relación con su madre, que hasta ese entonces es cercana, se pone a prueba y enfrenta a Estrella con un desenlace inesperado.

Nuestra Ana García actúa en la película.

Ms. Bum Bum Bar nos canta...

MICROFONO ABIERTO, 4168 Broadway (@ 177st Street, Manatan, Nueva York)

Miércoles 28 de mayo 2008, 7:00-10:00 PM

Donación: US$ 5.00 (2 por 1)

No hay comentarios: